Final lógico.

Los culés eran muy optimistas, yo entre ellos, que el Barça ganaría la liga jugando en su campo, con la afición volcada con el equipo y sabiendo que el premio por la victoria era una liga. Pensaba que se podrían solucionar todos los problemas de juego y que a un partido eran capaces de dar la talla y hacer un juego aceptable. Por desgracia me equivocaba y no quería ver las evidencias que se han ido produciendo a lo largo de la temporada.

La triste realidad es que el Barça ha llegado peor que nunca al tramo decisivo de la temporada, incluso peor que el año pasado cuando Tito exprimió al once titular durante gran parte del año y que se hizo el ridículo al final, aunque el rédito le diera para ganar la liga al menos. Ayer fue muy decepcionante, muy triste, ver el final de una generación irrepetible, ver la impotencia de querer y no poder, que las piernas no daban más y la cabeza aún menos.

El problema viene de lejos y siempre es más fácil criticar a los jugadores porqué cobran millonadas que no mirar el motivo por el que se ha podido producir. A menudo la gente se olvida de que los jugadores son seres humanos y que como todos pasan por diferentes momentos en su vida y que a lo mejor no es que no hayan querido, sino que no han podido.

Yo me resisto a pensar que jugadores que han dado la gloria a este club, que la mayoría aún estan en edades totalmente aptas para jugar, que se hayan olvidado de jugar o que no puedan llegar en condiciones a un tramo final de temporada, como ha pasado los dos últimos años. El problema viene de lejos y en gran parte es por culpa del entrenador, Los grandes entrenadores dicen que se juega como se entrena y los entrenamientos de este señor han dejado mucho que desear durante toda la temporada, los propios jugadores han filtrado a la prensa que la calidad de los entrenos no era la adecuada, lo típico que hacen vamos, ante los micros decir que están a muerte con él y luego “off the record” soltando las verdades. Muchos periodistas durante el año han ido contando esto, pero los resultados hasta el tramo final eran aceptables por lo que no se les daba mucho bombo, pero la realidad es que los entrenos eran patéticos y la preparación física ha sido horrible.

Pero claro, es lo que tiene poner a un entrenador de perfil totalmente bajo al que han mangoneado durante todo el año y donde han mandado en el vestuario las vacas sagradas y muchos jugadores se han dejado ir pensando en el mundial. Todo ese coctel ha sido una mezcla imposible de asumir. Si a eso le sumamos que tácticamente este entrenador ha sido un desastre, pues ya tenemos la causa principal de la debacle de este año. Un entrenador con cero personalidad, que se ha puesto en manos de los pesos pesados del vestuario y así le ha ido toda la temporada. Un entrenador que se ha limitado a poner a los que tenían más peso específico, más nombre y más ceros en las cuentas corrientes y les ha dicho “jueguen jueguen”. Un entrenador que no se le ha visto en toda la temporada ni una sola jugada ensayada, que no se ha visto un entramado defensivo decente, ni orden en la presión, ninguna solución a las dificultades planteadas por los equipos rivales, ninguna solución a pie de campo cuando los partidos se han puesto cuesta arriba, nada que estuviese fuera de su cuadriculada mente de cambiar un jugador por otro. Un entrenador que no ha confiado en ningún jugador de la cantera ni los jóvenes del primer equipo que tenía en el banquillo, que se ha limitado a rotar con 13-14 jugadores todo el año y encima equivocando las rotaciones siempre rotando a los mismos y la mayoría de veces por lesión. Un entrenador que en los partidos importantes ha salido con cinco medios y delantero y medio, fuese cual fuese la táctica del oponente, fiándolo todo a la calidad individual de los jugadores, que ha demostrado un total desconocimiento de la liga española y de los campos complicados y rivales que se le atragantan al Barça, que ha tenido un déficit terrible de análisis del rival, de su estilo de juego, de por donde se le podía hacer daño, nada de nada, sólo alinear a once y a ver si les sale un buen partido a los de arriba. Un equipo donde la solución táctica ha sido abrir a banda para que Alves mandara melones al área sin nadie para rematarlos. Un entrenador que en seis partidos ha sido incapaz de encontrar ninguna solución al planteamiento atlético, ninguna solución a sacar la pelota desde atrás, nada de nada.

Ayer el Barça encima jugó a contra estilo. Todo balonazos y juego directo porqué Pinto es patético con el balón en los pies, con los laterales cagados de miedo arriesgando cero en los pases y pegando balonazos. El primer cuarto de hora de la segunda parte fue más que lamentable. Con un equipo aterrorizado, dejándose comer por el rival de forma ridícula y sacándose la pelota de encima sin ningún tipo de responsabilidad, con los medios ofreciéndose a recibir y portero y defensas sin arriesgar nada jugando al pelotazo. Bochornoso ver al Barça jugar así. Una situación que se ha visto en muchas fases de la temporada y de forma voluntaria por parte del entrenador, que él mismo lo ha reconocido en varias ocasiones, que se encerraban un poco para encontrar espacios a la contra. Pues bien, lo que encontró fue perder una liga de forma ridícula. Con un ridículo y híper nervioso Pinto, que trasladó toda su inseguridad a la defensa.

Pero es que encima se le tiene que sumar la dirección de campo. Los cambios fueron bastante penosos y tarde, como siempre, cuando te estás jugando la liga y te queda un cambio que ni lo haces. Cuando el Barça encajó el gol, el cambio de Neymar por un horrible, una vez más, Pedro, que es patético que se hable de vender a Alexis y que no se diga ni mu de él, se debió realizar al momento. Es igual que sea el minuto cinco de partido, cuadriculado de los cojones, no siempre tienen que ser a los 20 minutos de partido como muy pronto. Después encima saca a Xavi por Cesc, como siempre hombre por hombre porqué este personaje no da para más, pero claro lo pidió la grada y el señor sin personalidad no lo dudó un instante. Ya partiendo de que Xavi no hacía ninguna falta tal y como se estaba jugando, pues lo sacó y se acabó el partido, si ya de por si costaba circular la bola, sólo faltaba el que la tiene que sobar 3-4 veces antes de darla, total para abrir a banda a Alves, que le pasan por los lados como motos cuando tiene que defender, además quitando a uno de los pocos que se incorporaba al remate. Ahí firmó la sentencia el patético entrenador.

Podríamos hablar también del penoso Lahoz, que sólo le faltó defender entre los colchoneros, porqué madre mía que partido de bajarse los pantalones, hizo todo lo que quisieron los colchoneros, se comió tarjetas, les permitió perder todo el tiempo que quisieron, lo de la barrera en la falta de Messi fue vergonzoso, pero bueno, no puedes acusar a un árbitro cuando no chutas a puerta casi. Pero ya sabían a quién ponían ya y a quien iba a favorecer. Es flipante cuando escucho a la gente decir que es un buen árbitro cuando es una persona que tiene un criterio que no tiene nada que ver con lo que dice el reglamento, que pita a su bola. Pero bueno, es un estilo que favorece a los equipos que van a pegar patadas y a destruir, como los dos equipos de la capital juegan a esto, pues así tiene el caché que tiene.

La cosa pinta mal la verdad, Luis Enrique tendrá mucho trabajo cuando llegue. Lo primero y más importante, es saber si tendrá el respaldo de la directiva y de la dirección técnica para tomar decisiones duras de la parte deportiva. Porque llevan dos años mandando los jugadores y entrenando fatal y ahora se pasará a un entrenador que es todo lo contrario. Lo más conflictivo el tema Xavi Hernandez. Con el Tata ha mangoneado lo que ha querido, mientras ha jugado ha hablado maravillas de él. Pero ayer que chupó banquillo, en un solo partido importante en el año, ayer ya la lio y hoy ha mandando a sus sicarios de la pluma a hacer saber que se enfadó por no jugar. Hoy ya ha salido el articulito de Mundo deportivo para hacer saber a la gente que ayer se rebotó y se cabreó por no jugar. Aunque juegue de una forma lamentable. Esto el año que viene tendría que ser el pan de cada día, salir los minutos de la basura y jugar partidos de copa y los intrascendentes. Veremos si es tan barcelonista como dice, ayer de momento, demostró ser un egoísta, la verdadera cara de Xavi. Esperemos que la directiva respalde al nuevo técnico en este proceso y que Luis Enrique lo afronte como lo hizo con Totti en la Roma. Lo que está claro es que va a ser un nuevo caso Raúl y que será importante no dejarse llevar por el entorno controlado que tiene.

Para acabar comentar el tema de la final four de euroliga. El ridículo histórico delante de millones de personas que sufrió el Barça fue muy lamentable. Es lo que pasa cuando tienes un entrenador de ir por casa y que en los momentos decisivos no da la talla. Llevamos ya años dando risa por Europa con los plantillones que tenemos y con el balonmano pasa igual. No siempre te pasa un caso Pep Guardiola, no por ser de la casa va a funcionar igual. Y se está demostrando que la fórmula no es la que toca. Empieza a ser hora que Creus apueste por un técnico de nivel top europeo y se vaya de una vez por todas a ganarlo todo.

Porqué queda la traca final, el otro Pascual en la final four de balonmano, otro que lleva años haciendo el ridículo por Europa, esperemos que la calidad individual sea suficiente este año porqué hay un auténtico plantillón. Pero si hay que confiar en el técnico lo llevamos crudo.

¿Campeones?

El Barça tiene una oportunidad única de ganar la liga, depende de si mismo y ganando será campeón. Mucha gente habla que si no merecerá esta liga, que si los jugadores no han dado todo y que aún ganando no se salvará la temporada. Tienen una parte de razón y una parte que no, como todo en la vida. Tienen la parte de razón que el Barça este año no ha sido el Barça de los últimos años, en eso tienen razón, el juego del Barça ha dejado mucho que desear en muchos partidos. En mi opinión por una muy mala planificación de la temporada, por un muy mal entrenador y por la dejadez durante la misma, por parte de algunos jugadores.

El Barça el año pasado ya pegó un gran bajón en cuanto a juego, se sumaron muchos puntos pero la planificación y la gestión en la victoria fue muy mala, más bien dicho autogestión, porqué por desgracia Tito sólo pudo estar una parte de ella. Se sumaron 100 puntos pero se hizo el ridículo en Europa y ni se llegó a la final de copa del rey.

Este año aún ha sido peor, porqué los errores que se produjeron no se han solventado, el club sabiendo de las debilidades en según qué posiciones, lo fiaron todo a la obsesiva opinión de su presidente en traer a Neymar, cuando estaba apalabrado para el año que viene y que por el miedo con las ofertas que estaba recibiendo hizo que se anticipara su llegada al Barça. Una jugada lamentable y patética, porqué si estaba pactado con el jugador, lo que tenían que hacer era esperar un año y si éste no quería esperar ya era un problema suyo y a lo mejor no quería venir tanto al Barça como decía. El aficionado blaugrana quiere jugadores que demuestren que quieren venir, no mercenarios al mejor postor. Por esta absurda operación, se gastó todo el dinero en fichajes que hacían más falta. Encima viene el iluminado de Martino y dice que con lo que tiene le basta.

Un entrenador que ha sido también uno de los grandes errores de la temporada. Un entrenador caduco, obsoleto en sus métodos de trabajo y al cual el equipo le he venido enorme. Una cagada que hay que poner en el debe del presidente, o eso dicen que era, cuando ya tenía Zubi apalabrado a Luis Enrique el año pasado, un entrenador que por su mano dura y su obsesión en los entrenos, era el más adecuado para una plantilla cansada de ganar y que el año pasado ya jugó muchos partidos andando. Pero claro lo fácil es culpar a Zubi cuando el presidente impone a entrenador y estrella, sacrificando toda la parte deportiva. Un presidente que ha destrozado un ciclo ganador a costa de hacer sus negocios particulares y dejar a sus amiguitos bien arreglados de cara al futuro, que cuando se ha visto en problemas se ha marchado como un cobarde.

Así pues, cuando los entrenadores buenos, dicen que se juega como se entrena, se trae a un entrenador prehistórico, con unos métodos totalmente obsoletos y unos entrenamientos que distan mucho de ser los adecuados para un club de máximo nivel, como ha filtrado más de un jugador a los medios, que encima vienen y chocan con los técnicos de la era Vilanova que se tuvieron que quedar por contrato, debido a la inmediatez de lo que pasó con Tito. Dónde se ha visto más el fracaso ha sido en las semanas blancas que ha tenido el equipo que no se han traducido para nada en los partidos, cuando tenían que estar mucho mejor física y mentalmente y ha sido todo lo contrario. Es inaceptable que la semana que te juegas media liga, después de recibir otra oportunidad, que permitas fiestas, que pagues asados y des días de descanso a mansalva. Esta semana más que decisiva ha parecido la última de la temporada tras jugarlo todo. Lamentable.

Encima sale el presidente a decir que esta semana el equipo va a entrenar y a concentrarse en ello, reconociendo implícitamente que esta semana pasada ha sido todo lo contrario. Tampoco es que me genere mucha confianza, que se diga que se va a preparar como toca el partido, porqué el entrenador actual ha demostrado su incapacidad total para ello y ha ido acumulando ridículo tras ridículo ante los colchoneros este año. En una temporada en la que no se ha visto ni una solución táctica a los problemas, ni ninguna jugada ensayada a balón parado, ninguna organización táctica defensiva u ofensiva. Un entrenador que no tiene ni puñetera idea de cómo funciona el futbol europeo y mucho menos en can Barça. Pero la culpa de su incapacidad no es suya, es del que decide ficharlo y luego se larga como un cobarde. Si de alguna cosa tiene su culpa él, ha sido por dejarse influenciar por la vaca sagrada, ponerlo por decreto y poner un once para que él no tenga que correr mucho, más parecido a la roja que al Barça, en todos los partidos importantes, además de no demostrar ningún tipo de personalidad.

Lo único que me puede generar confianza es que se supone que habrá ambientazo de las grandes ocasiones en el campo y que los jugadores saben lo que se juegan y que es el último esfuerzo del año con un posible premio muy bueno, yo sigo confiando en estos jugadores que tanto han dado a este club y que esperemos que encararán el partido como toca y pasando de lo que diga su entrenador. Un entrenador que por desgracia volverá a sentar a Cesc y a poner a jugar al cono, por lo tanto jugaremos con uno menos, pero espero que Messi tenga el día y que vaya a por todas y que jugando con dos extremos abiertos pueda tener más espacios el crack argentino.

Me da la risa, cambiando de tema, cuando escucho que el Barça no merece esta liga. Ha sido una liga atípica por muchos motivos, con un Barça muy por debajo de sus posibilidades pero que no ha sido ni mucho menos inferior a sus otros rivales. Lo que pasa es que se han encontrado un equipo en horas bajas con dos equipos que basan su juego en el contragolpe y su famosa “pegada”. Esto ha hecho que el Barça haya pinchado mucho, pero que los otros dos en muchos partidos han pinchado por su mediocridad ofensiva ante equipos bien cerrados atrás, que han compensado las cagadas azulgranas. Es de chiste que digan que no merece la liga un equipo que ha sido líder durante 23 jornadas de liga, por 10 del Atleti y por 4 del Madrid, que además ha sido campeón de invierno y que en caso de victoria tendrá el average particular a favor respecto los dos rivales y el average general mejor también. Otra cosa es que luego se acuerden sólo de lo que les interesa, pero si hablamos de regularidad, ningún equipo ha sido más regular que el Barça. El peor Barça de los últimos años, peleará la liga hasta el final a los dos finalistas de champions, por los que les han llovido los elogios. El Barça ganando la liga la semana que viene podría decir que ha hecho una buena temporada, aunque para el culé no sea para nada buena por el juego mostrado durante el curso. Pero esto ya entra, por suerte, dentro de la exigencia blaugrana, en la que no todo es ganar y se tiene que exigir un juego acorde a lo que se les espera, no como los otros dos que en el mismo partido son silbados y aplaudidos según el resultado del momento y el final, que la exigencia en juego es cero y sólo miran si se gana o se pierde y a partir de ahí hacen el análisis del partido.

Ha sido un año, el azulgrana, cargado de problemas, de situaciones negativas y de muy mala suerte en los momentos importantes del año.

Ayer, sin ir más lejos, el Barça salió con mucha fuerza ganar el partido, con una primera parte bastante buena pero muy mala suerte en la definición, se generaron ocasiones durante el partido como para haber ganado con tranquilidad. Ante un equipo como el Elche, que con un punto salvaba la temporada y que se encerraron con diez tíos delante de su área y un delantero a ver que cazaba por ahí. Fue un entreno de lo que va a ser el partido ante el Atleti el sábado que viene. La mala noticia es que no se marcó, la buena que se generaron ocasiones suficientes como para haber ganado y que dio las sensaciones de tener claro como atacar, en lugar del frustrante pase continuo de Alves al área de los últimos encuentros. Un partido donde, a pesar que se quiera matar a los de siempre, se notó muchísimo la presencia de Cesc en el campo, dando frescura al juego, improvisación, dando juego a sus compañeros y compenetrándose muy bien con Alexis y con Messi. Los mejores del partido fueron Cesc y Alexis, los dos jugadores casualmente que quieren facturar las “brillantes” cabezas pensantes del club. Es insultante que quieran regenerar el equipo y que para hacerlo decidan vender a lo poco que ha funcionado en el equipo durante el año.

Porqué ayer, por ejemplo, el que no rindió una vez más fue Pedro, cagando todas las oportunidades que le dieron sus compañeros, empezando la jugada por la derecha y dejándole sólo por su banda para que decidiera el partido y fallando casi en todos los pases que intentó. Ya se puede poner las pilas para el próximo partido porqué si no que juegue Tello. Otro que no tuvo su mejor día fue Iniesta, pero a pesar de ello lo intentó en todo momento y es un jugador que todavía le queda mucho recorrido en can Barça, no se le puede recriminar nada, porque lleva un buen año, a diferencia del canario que lleva dos años horribles.

El principal problema de cara al próximo partido, es que, a pesar de todo lo bueno y diferente que se vio ayer en Elche con Cesc en el campo, el sábado volverá a ser suplente para volver a ver un equipo pastoso, jugando con la vaca sagrada y sus continuas aperturas a banda, cuando el equipo rival ya ha puesto a sus diez tíos otra vez delante de su área, para que Alves ya sin posibilidad de sorpresa pueda centrar sin ningún peligro. Los defensas del Atleti le van a agradecer la fantástica táctica inútil al mediocre entrenador azulgrana. Esperemos que el año que viene Luis Enrique venga con todo el poder posible y que se deje de gaitas y ponga a los mejores, que eche a quien tenga que echar del club y que no le tiemble el pulso.

Hablando de bajas me sorprendieron mucho las declaraciones de Mascherano, que dejaba entrever que se marcha, cuando yo pensaba que se quedaría como mediocentro en el equipo, me parecía aún muy válido. Una pena si al final se marcha porqué es un ejemplo de profesionalidad y de trabajo para el equipo.

Sorprendente también la noticia que David Luiz dirá pasado el mundial que ficha por el Barça. Sorprendente porqué lo normal sería hacerlo antes del mundial, espero que no signifique que el club vaya a empezar a negociar tras el mundial y que ya esté todo acordado, porque como el club quiera montar el equipo tras el mundial y no antes, es para que les den el finiquito antes de que empiecen a cagarla.

Esto no es el Barça.

La historia del Barça ha pasado por muchos altibajos pero los últimos años estaban todos sus aficionados muy orgullosos de su equipo, con un estilo de juego inigualable y que ha creado muchos adeptos de fuera de nuestras fronteras porqué ganaba y maravillaba con su juego.

Pero la característica principal de este equipo era el amor propio y la confianza y la esperanza hasta el último momento, la competitividad del equipo y el no dar un partido por perdido y luchar hasta el final con sus ideas y sus principios. Por desgracia en las últimas semanas se ha visto un Barça con el que yo no me identifico, ni por su poca ambición ni por su poca confianza en sus posibilidades. Se vio el día contra el Athletic un equipo que parecía que ya estaba de pretemporada, que se vio un poco más de ambición en el Madrigal por la motivación de dedicarle una victoria a Tito, pero por desgracia el sábado le hicieron el peor homenaje posible, el día que precisamente homenajeaban a una persona que ha sido ejemplo de fuerza, de lucha y de no dar nada por perdido, es cuando el Barça se dejaba sus opciones de liga con un empate ridículo, por la forma en la que se produjo.

Se supone que el Barça juega para su afición y yo como aficionado, ayer por la noche mi sentimiento era de cabreo, de ver como por una mierda de minuto del descuento, donde el equipo pasó de todo, ahora se podría depender de ellos mismos para ganar la liga a falta de dos partidos, faltando tan poco y que por una desconexión lamentable se ha evaporado, que ahora va a necesitar otro pinchazo merengue que es muy difícil que se produzca, porque van a intentar llegar a la última jornada con opciones. Un Madrid al que por cierto volvieron a ayudar a que no se descolgara de la liga, regalando el primer gol cuando la vedette derriba a su defensor claramente antes de pasársela a Ramos y cuando el trencilla se come un penalti sobre Parejo. Al árbitro sólo le faltó subir a rematar los córneres merengues, incluidos los cinco de añadido cuando el Valencia sólo había hecho un cambio. Pero bueno, así se ganan las internacionalidades, ayudando al equipo del gobierno.

En fin, ahora, por la dejadez azulgrana, resulta que se ha llegado a la situación que ningún blaugrana quería, porqué ahora, si no hacen el ridículo en Elche claro, se producirá que el Barça ganando el último partido pasaría al equipo colchonero, pero que le puede brindar la liga al Madrid. El Barça por sus cagadas se ha metido en un marrón de mucho cuidado, que sólo puede arreglar otro pinchazo merengue. Porqué todas las situaciones posibles ahora mismo son de ridículo, ganar el último partido y darle la liga al Madrid o dejarte perder o empatar en casa y renunciar a tus opciones de campeonato sólo por no dársela al Madrid, un Madrid que juega contra su filial en la última jornada con los deberes seguramente ya hechos, tendríamos que ser muy ilusos para pensar que el Español puede puntuar en el bernabeu.

El principal problema del Barça este año ha sido la poca competitividad en partidos clave, un club acostumbrado a ganar ligas inexplicables en la época del Dream Team, que no haya confiado en esta liga es de juzgado de guardia, una situación muy reprobable y que se tiene que analizar seriamente de cara al futuro.

Una situación en la que tiene en gran parte culpa el entrenador, por cagarla constantemente en las alineaciones en los partidos importantes, por ser un cobarde como técnico y dejarse influenciar por las vacas sagradas y por no ser capaz en ningún momento de entrenar como dios manda a este equipo, de motivar a sus jugadores para que entrenaran al máximo para que se reflejara en los partidos, un entrenador que no se ha visto en toda la temporada una jugada ensayada decente, no se ha vista ninguna solución táctica y que ha ido dando palos de ciego todo el año de una forma lamentable.

El sábado fue la muestra final de su inutilidad. Resulta que durante todo el año, cuando el Barça ha estado en problemas de tener que remontar, ha sido incapaz de sacar a un medio ofensivo o un delantero por un defensa, que durante todo el año sus “brillantes soluciones tácticas” han sido quitar medios y dejar un 4-2-4 con el medio campo destrozado. Pues ayer resulta que al señorito se le ocurrió quitar a un defensa y meter a Busquets de central y destrozar el medio campo jugando sin un cinco. Una cagada tan enorme que luego saca a Song por Xavi para arreglarla pero faltando tan poco que ni tuvo tiempo de sudar el camerunés. Quien nos lo iba a decir que veríamos en el Camp Nou, jugando ante el Getafe, a un entrenador del Barça haciendo un cambio defensivo. Con el despropósito final de sacar a Tello a jugar un minuto tras hacerlo calentar toda la segunda parte. Lamentable, entiendo perfectamente que el jugador se lo recriminara.

La única explicación posible al cambio, es que no quiso señalar a un jugador que hasta los de la radio preguntaban irónicamente si había jugado o no, el jugador que en los últimos partidos ha sido sustituido con el equipo perdiendo y que se han remontado ambos partidos. Pero claro, ¿cómo tenía que hacer otra vez el cambio si ya en el último partido en casa el jugador le pegó la bronca al entrenador, que se tuvo que bajar los pantalones e ir a explicarle porqué lo cambiaba?

Después, encima, tenemos que aguantar como la vaca sagrada sale delante de los micros a decir que no han estado a la altura, que se ha acabado la temporada y que hay que ponerse las pilas el año que viene, para que toda la prensa saliese a alabar sus declaraciones y a decir que si ha sido sincero, que si ha hecho autocrítica y que ha reconocido los errores. ¿Reconocido los errores?

¿Qué errores ha reconocido este señor si desde que está en el primer equipo no le he escuchado nunca personalizar una mala actuación suya, que siempre se ha escondido acusando al colectivo? Si después de hacer el ridículo y perder de forma lamentable los títulos en una semana, todavía iba diciendo ante las cámaras que era injusto y que habían sido mejores que el rival, en partidos que pudieron acabar goleados. Si hubiese hecho autocrítica, hubiese visto a principios de temporada que este equipo ya le viene grande, que ya no está para este tipo de competitividad, que ya tiene 35 tacos y que no puede rendir como hacía antes, que tuvo que dar un paso al lado y favorecer el relevo generacional en su posición.

Autocrítica es lo que ha hecho el gran capitán Puyol, que vio que ya no estaba para rendir al máximo nivel y salió ante las cámaras a decir que se iba a final de temporada. Esto es hacer autocrítica y ser un jugador sincero con uno mismo y que siente unos colores y decide irse y facilitar su marcha a pesar de tener dos años más en vigor. ¿Qué me están contando de autocrítica y responsabilidad de un jugador que ha impuesto su titularidad todo el año y ha mangoneado al entrenador para conseguirlo y asegurarse el mundial?

Unos medios que por cierto, a pesar de haber vivido ligas imposibles, llevan días matando al equipo, sin apoyar lo más mínimo y buscando sustitutos y bajas y altas.

Unos sustitutos que de momento siguen sin llegar y que se habla de muchos nombres y de ninguno en concreto como más factible, han abierto el cajón con las listas de todos los años y a llenar páginas y minutos de tele y radio. Que no hacen más que poner al mercado y casualmente los mismos de siempre, a los que han matado todo el año a pesar de hacer mejores números que el resto en sus mismas posiciones. Se habla ahora de ofertas de más de 50 millones por Cesc. ¿A lo mejor si quieren pagar esto será que no es tan malo como quieren vendernos desde hace tiempo no? A lo mejor habría que ver que tiene 26 años y que quizá sería mejor quedárselo y jubilar a otros que se pasean por el campo. Es surrealista planear una reforma de tu equipo y vender al de 26 y quedarte al de 35 la verdad.

Lo mismo pasa con Alexis, que se hablan de ofertas de más de 35 millones y que en cambio no se cuestiona la continuidad de un Pedro que ha estado muy mal los dos últimos años como mínimo y que todo lo que le está llegando a los pies lo está chutando, siendo un chupón de mucho cuidado, pensando más en asegurarse el mundial que en pensar en su equipo, pero claro los amiguitos de la prensa que tiene Pedro no los tiene el pobre de Alexis, que sólo se dedica a entrenar y a jugar. El jugador que ha marcado más goles tras Messi y que también se le quiere vender. Es ridículo.

Un Messi que por cierto se ha hablado todo el año que se reserva para el mundial y que resulta que es el único que está mostrando un mínimo de ambición y de competitividad en los últimos partidos. Pero claro es más fácil rajar de él que no de los que luego van a ir a buscar para conseguir entrevistitas pre mundial, que son de aquí y que se han escondido mucho más que él.

Para acabar, una semana más, el aficionado blaugrana puede estar contento gracias a unas secciones, que el aficionado solo apoya mayoritariamente cuando se juegan los títulos y que el resto del año les da bastante la espalda sin llenar el pabellón. Unas secciones que desde que ha llegado la nueva junta han sufrido recortes en sus presupuestos y que no tienen más respaldo por parte del presidente de turno y su junta que cuando ganan títulos para salir en la foto.

Estas secciones, a pesar de todo, siguen dando una lección de competitividad y demostrando por qué el  Barça es más que un club, porqué no sólo es futbol, paseando por fuera de nuestras fronteras la bandera blaugrana. Una semana más los aficionados polideportivos del Barça han gozado de tres títulos más para poner en sus vitrinas, uno de ellos europeo y lo que queda todavía por delante para competir en muchas de ellas. Copa de Europa del hockey y dos del rey por parte del balonmano y el futbol sala.

Un futbol sala, que la semana pasada alababa a su entrenador por decidir hacer cambios, cuando se está ganando, para seguir ganando y renovar al equipo, pero que me ha sorprendido muy negativamente la noticia que no tienen intención de renovar al capitán Jordi Torras, precisamente cuando hace muy poco dijo que renunciaba a la selección para centrarse en su club. No me ha gustado nada la noticia y no creo que sea un buen trato para el capitán, que decidió hace unos años volver a su casa, igual que hizo también Javi Rodríguez y al que por cierto también despidieron por la puerta trasera. No sé, entiendo y estoy de acuerdo en que se tiene que renovar la plantilla, pero creo que hay jugadores en la actual plantilla que merecen menos seguir en ella. Una noticia muy triste y para mí muy injusta, pero que sólo queda aceptarla y dejar hacer al entrenador que ha hecho y desecho muy bien en los últimos años y que merece todo el crédito posible.