La liga.

Se le suele llamar a la liga el torneo de la regularidad, este año se está cumpliendo más que nunca, porque una semana tras la otra estamos asistiendo a errores arbitrales que perjudican al Barça y errores arbitrales que benefician al Madrid. Pero claro, este año ya no hay ruido mediático y se reduce todo a que los árbitros son muy malos y que unas veces te dan y otras te quitan. Casualmente siempre le dan al mismo y le quitan al otro. Es más regular que nunca. Desde que yo tengo uso de razón o que recuerde, es la liga más adulterada que he visto de todas, porque en una liga puede haber errores puntuales hacia uno u otro equipo, pero otra cosa es que sea cada semana. No sé, que diga el señor Florentino o el dueño del club Mourinho, cuantos puntos necesitan de ventaja para estar tranquilos. Así con un poco de suerte este año podremos tener algún arbitraje decente que no nos deje de pitar penaltis o que en las jugadas de fuera de juego sea equilibrado hacia ambos equipos, que respete por igual a ambos equipos, incluso que tenga criterios similares hacia los dos equipos. Porque esto está brillando por su ausencia.

Está brillando por su ausencia cuando ves que el equipo rival hace 23 faltas y tú 7 y que tú te llevas 7 amarillas y el rival 2 en los últimos minutos. Cuando ves que un jugador rival marca en fuera de juego y luego a ti te lo pitan, cuando hay un defensa metro y medio más atrás que tu delantero. No es pedir mucho me parece. Que te respete un árbitro que el equipo local le va cómo un loco a protestar cada falta tirando al público encima y así le perdonen la tarjeta en cada falta sin balón y por detrás. Que luego en cambio tú vayas a decirle algo y te saque amarilla. La amarilla que le saca a Valdés se la saca por ser el portero, porque aun no le había dicho nada y cuando levanta la vista y ve que es el portero se la saca enseguida, cuando era el capitán. Si el capitán no puede hablar con el árbitro pues ya no sé quién podrá. Bueno si puedes, si llevas otra camiseta que no sea la blaugrana claro. Un árbitro que cuando Alexis sigue la jugada le saca amarilla y que luego lo hace Ibra y que se coma la tarjeta. Un árbitro que permita el contacto a ambos equipos y no sólo a uno, que respete al equipo que intenta jugar a futbol y amoneste a los jugadores que pierden tiempo. Me parece que no es pedir mucho, ni pedir que le den cosas que no son. Simplemente que piten con un equilibrio hacia ambos equipos. Un árbitro que cuando el linier no te levanta la bandera, no anules tu el gol porque veas que los jugadores de casa se pongan las manos a la cabeza y vayan a comerse al árbitro. Luego ves en otros equipos que su capitán en los pasillos le dice al árbitro que se vaya a celebrar con el Barça y no pase nada, que los jugadores le digan de todo cuando acabe el partido y no pase nada, que el entrenador vaya a esperarlo al coche y no pase nada y que luego en cambio Mascherano es expulsado cuando ya ha terminado el partido según el acta por discutirle decisiones suyas. Me gustaría también que los árbitros en lugar de buscar su foto yendo a los banquillos a amonestar a jugadores y entrenadores por tonterías, que se interesaran porque se respetara el juego dentro del campo, incluso en los laterales cuando desaparecen los recogepelotas.

Me gustaría que igual que tienes que cumplir que tu campo tenga unas medidas, que se tuviese que exigir a los equipos que tuviesen siempre un césped decente y no uno que no han cambiado en 47 años. Que no fueses a un campo y tuviese el césped varios centímetros más alto que de costumbre y más seco que de costumbre. No estaría mal, igual que cuando empiezas el año y tienes que dar las medidas del campo para todo el año, que se tuviese que hacer lo mismo en estos aspectos y que se respetara. Pero supongo que es mucho pedir.

Supongo que es mucho pedir también que los equipos tuviesen los mismos derechos a tener a los mejores árbitros en los partidos más difíciles, porque aquí es donde radica el principal problema. No estoy diciendo que haya un villarato a la inversa del que decía la caverna el año pasado. No creo en que un árbitro le llame el día antes y le den órdenes. Pero los árbitros no son tontos. Y si tú ves que en los últimos años te están machacando cada día en los medios porque no favoreces al Madrid, pues este año están recogiendo sus frutos. Este año están todos muy calladitos, porque las cosas van muy a favor, tanto en arbitrajes como en calendario. Está muy bien que un equipo en la época que se juega copa del rey y eliminatoria de champions, haya tenido que viajar a Villareal, jugar contra el Valencia, viajar a Pamplona y visitar el Calderón, mientras que el otro equipo no tiene que moverse de la ciudad en un mes y juega contra Levante, Racing, Rayo, Getafe y luego contra el filial en casa nuevamente. Está muy bien ver como Mourinho está demostrando que su táctica en todos los equipos que ha estado ha recogido los frutos en su segundo año.

También supongo que si el Madrid acaba ganando la liga, el señor Sánchez Arminio supongo que irá a la celebración, porque con sus designaciones a la carta ha favorecido notablemente el campeonato. Es curioso como el Madrid a la que se queja de un árbitro, éste desaparece del mapa, mientras que el Barça por mucho que le jodan a los dos días vuelven a pitarle. Esta semana contra el Valencia pita Turienzo el que se comió el penalti en Cornellá. Que me expliquen a mí que pinta Paradas Romero en un Osasuna-Barça si probablemente es el árbitro más cobarde de la categoría. Que me expliquen que pintaba el árbitro de la ida de copa en Valencia cuando era el único partido de la semana. No entiendo que al Barça durante todo el año siempre le toquen los mismos caguetas fuera de casa que se comen el pito y se cosen el bolsillo de las tarjetas y permiten el juego duro del rival. Así cuesta mucho más ganar.

Luego ves que al Madrid le pone al amigo Undiano. Un Madrid que sabe “manejarlo” al estilo final de copa. Es decir, pego yo pero voy como un loco a protestar y me perdona la tarjeta. Así lo hizo Alonso todo el partido con barra libre, Granero derriba a un jugador con una patada por detrás cortando una contra y se vuelve medio loco y se la perdona. Ramos y Arbeloa le hacen un bocata a Koné, el primero con un codazo al cuello y envía al jugador contra Arbeloa y tienen la poca vergüenza de pedir tarjeta al árbitro, no tirar el balón fuera cuando el jugador se queda grogui en el suelo e ir como locos a recriminarle a Koné que se tira, cuando Undiano para el juego, porque los “deportivos” jugadores blancos no la tiran fuera. Luego Ramos se permite hacer una falta clarísima (la que acaba en gol del Levante) y quedarse sólo en falta, le pega patada a Koné en la banda cuando ya se le había ido el jugador, señala la pelota con la mano y pita fuera de banda en lugar de falta y tarjeta. Luego en la segunda parte le derriba claramente, cuando ya se le iba con una amarilla ya en su haber, se queda en falta sólo y encima tiene la poca vergüenza de querer levantar rápido al jugador que está en el suelo. Y esto sin contar, la de faltas que se comió sobre los delanteros granotas cuando intentaban controlar para que saliese el equipo un poco. Esta es la épica del bernabeu, me como el pito y que embotellen al rival. Por esto aunque el rival se adelante están muy tranquilos. Porque tarde o temprano les pitaran el penalti de costumbre o les ayudaran cuando lo necesite. Así gana el Madrid. Un Madrid que estaba siendo incapaz de marcar, que es cierto que le pitan un fuera de juego a Benzema que no era, pero que desde el punto de vista del linier parece que la toca, luego la toma frontal lo desmiente, pero el linier piensa que la toca Higuain (igual que lo piensa erróneamente el de Pamplona con el gol mal anulado de Alexis) y pita fuera de juego. Pero bueno entonces empezó el espectáculo bochornoso del Madrid, tirándose a la piscina dentro del área en cada jugada a balón parado para forzar penalti y portándose como energúmenos golpeando por todas partes, con Pepe el habitual sobre Munua y sobre todo el marrano de Ramos. Un Ramos que se dedicó en cada jugada de estas a clavar el codo en la cara de los rivales. Pero casualmente el árbitro le pilla agrediendo a un rival y se queda en amarilla. Si un jugador del Madrid ya se puede tomar la justicia por su mano que agrediendo se queda en amarilla ya no entiendo nada. No fue tan cobarde con Iborra no. Una jugada que viene de un balón parado en el que Ramos (que ya no debería estar en el campo) toca un balón con la cabeza y va a parar a Higuain que choca con Iborra y el jugador como se ve en la repe le cae el balón a las manos, en ningún momento hay voluntariedad y tiene incluso los ojos cerrados. Pero si lo pita pues no pasa nada porque es claro que la toca, pero lo que no puedes hacer es echar a Iborra porque son involuntarias. Ya que te “atreves” a pitarlo por lo menos no te cargues el partido. Pero bueno no hay el mismo criterio para unos y otros. Alguien debería decirle a Pepe también que para parar a un jugador no hace falta ir a lesionarle de por vida, pero se ve que sigue igual que siempre, pero bueno como no va a seguir igual que siempre si en casa le cantan Pepe mátalo y luego va a darles las camisetas a los ultrasur. La entrada por la que ve la amarilla es una vergüenza para el futbol, deberían explicarle que con una zancadilla o un agarrón se puede parar igual al jugador, no hace falta clavar los tacos a su empeine-tobillo. Pero de donde no hay es imposible sacar. Un futbolista made in Madrid vamos, pisa pisa que no pasa nada.