Tranquilidad.

El Barça ayer tuvo un pinchazo inesperado en campo del Getafe, campo por llamarlo de alguna manera, porqué el estado del terreno de juego era muy deficiente. No es excusa para hablar del partido de ayer, porqué con campo bueno o no, el Barça debió y mereció ganar, pero ya viene siendo habitual, que cuando va el Barça a jugar fuera de casa, se encuentre campos muy pesados, con el césped en malas condiciones, para que el balón no ruede correctamente y más lento, así poder montar el entramado defensivo y poder llegar a todas las coberturas. Lo del campo lo digo porqué se habla de la mejor liga del mundo (vaya chiste de mal gusto) y se tiene que ver partido tras partido como se producen estas jugarretas desde hace tiempo y que desde la federación española de futbol no se haga nada al respecto. Si se lo hiciesen a otros equipos pues a lo mejor se pondrían manos a la obra, pero las comparaciones son odiosas y, en campos como por ejemplo la Rosaleda, el día contra el Barça hasta tiraron arena de playa al campo, mientras que cuando fue el Madrid, parecía un tapiz. Curiosamente también, ha sido quejarse el Madrid de cuando le ha tocado jugar miércoles-sábado, cuando la caverna le ha dado bombo y platillo, que a la semana siguiente, el Barça juega miércoles por la noche y sábado a las 16 horas. Está siendo la liga de las casualidades, curiosamente en dichas ligas de las casualidades suele ganar siempre el mismo equipo por decreto.

El Barça anoche no tuvo la suerte de cara, suerte de que a Messi se le fuese al larguero la falta que sacó de forma magistral, por ejemplo o suerte de que un árbitro haga su trabajo y pite lo que pasa en el campo, que pite los penaltis cuando lo son y bien claros y no como pasa con otros equipos que cuando les cuesta marcar les abren la lata con penaltis que no son o goles en fuera de juego, o con faltas previas para conseguir rematar. Es curioso cómo según que equipos se producen errores arbitrales a favor para que puedan abrir el marcador y encarrilar el partido y que en el caso del Barça, no piten un penalti tan claro. La afición culé no pide que le ayuden a ganar, simplemente piden que cuando hay un penalti tan claro que se pite, que cuando un jugador agarre a Messi por detrás que le saques amarilla para que no lo vuelva a poder hacer, porqué dominando el partido, ante un rival tan encerrado que no puedes marcar, que te escatimen un penalti, pues me parece bastante importante y decisivo en un arbitraje, incluso que cada jugada que pitas falta, que permitas que el infractor se lleve la pelota y no deje sacar rápido la falta, que se produzcan faltas continuadas y de todos los colores sin que saques una tarjeta hasta el minuto 30 de la segunda parte, que permitas que se pierda más de un minuto en cada saque de portería, que desaparezcan los balones en los saques de banda, etc. Lo peor de todo es que es reincidente, porqué pasó lo mismo ante el Celta en el Camp Nou, curiosamente con el mismo árbitro. El Barça no pinchó por el árbitro, ni por el campo, pero ambos ayudaron a que no tuvieran las cosas de forma normal, que pudiesen jugar a gusto y que pudiesen abrir un marcador que les costaba. Algunos dirán, el campo y el árbitro es el mismo para ambos equipos. Sí, es cierto, pero para jugar con once tíos al patadón y que cacen alguna los delanteros no necesitas un campo en buen estado, al contrario, intentas beneficiarte de los malos botes y que se puedan despistar los centrales, que un árbitro sea permisivo, cuando lo que quieres es cortar el ritmo en todo momento, que un árbitro sea permisivo te puede perjudicar en alguna jugada aislada, pero en el cómputo global te va a beneficiar y mucho. Me ha hecho mucha gracia, por cierto, que se hable de final polémico y de que el delantero del Getafe se iba solo ante el portero, cuando en la imagen se ve perfectamente que en la pugna por la pelota con Iniesta, el manchego ya se ha frenado porqué ha pitado el final, incluso Mathieu también ya estaba parado, pero claro el jugador sigue la jugada ya con el juego parado y a los medios cavernarios, les “pone” más, que se hable de un final polémico que no de que al Barça le han tangado un penalti muy claro que pudo ser decisivo, más viniendo del mes horribilis en que al Madrid le han beneficiado en todos los partidos para que abra el marcador. Si fuese al revés llevaríamos un mes con el villarato de marras, pero claro ahora toca hablar de casualidades y de tapar cosas como la que pasó ayer en Getafe.

El Barça ayer pecó de falta de profundidad, pero sobretodo de precisión en los pases y de velocidad en la circulación, de creación en la zona de la sala de máquinas, donde es muy importante un jugador que le dé fluidez. El Barça jugaba en dicha posición con un ex jugador de futbol y así es muy difícil generar juego. Además esto supone que Messi tenga que bajar a recibir a medio campo para intentar organizar él, cuando no es su función, que tenga que jugar por decreto la vaca sagrada y que tengas a Rafinha fresco de partidos y a Iniesta en buenas condiciones, sentados en el banquillo, pues tiene delito la cosa. Pero por desgracia Lucho se ha plegado a la prensa y al poder interno que tiene la vaca sagrada. Es algo que se temía cuando se quedó por dinero a costa de sacrificar el futuro del equipo, de conseguir una transición pacífica y positiva para el Barça. Ya consiguió que se largaran Cesc y Thiago asqueados de chupar banquillo y ahora tocar frenar la progresión de Rafinha y Sergi Roberto. Pero bueno el “gran culé” (que hipócrita) que se quedó por dinero y no le ha importado nada el futuro de su club aún sigue y lo peor de todo, titular.

Es de lo poco que se pedía por parte de la afición con el final de temporada del año pasado, una transición y un rejuvenecimiento de la plantilla, que llegara un entrenador con un par que ponga a los que están mejor y no a los que más cobran, pero por desgracia, tras empezar muy bien, al final se ha acabado plegando priorizando una tranquilidad en el entorno a ser fiel a sus ideas. Me hace gracia por eso que ahora se hagan comparaciones numéricas con el Tata, cuando el argentino se dedicó a poner a los once con más caché, a jugar con 12-13 jugadores todo el año y quemarlos de mala manera. Cuando no se le vio ni un cambio táctico en toda la temporada y que se limitaba a poner a los que cobraran más y se buscaran la vida en el campo, que no se entrenaban jugadas a balón parado y que se entrenaba como hacía veinte años. Las diferencias entre uno y otro en su paso por el Barça están siendo abismales, pero claro, lo fácil para los simples de la caverna blaugrana es coger números y decir que Lucho ha perdido más puntos claro.

Es igual que los que sacan que ante el PSG fue decisiva la entrada de Xavi, haciendo campaña ya para que jugase en Getafe, cuando realmente lo que fue clave fue que Blanc destrozara su medio campo para sacar delanteros. Casualmente se olvidaron que el Barça remontó el partido sin él en el campo.

Pero es la táctica de los “analistas” del entorno, amiguitos del de Terrassa. Cuando chupa banquillo, es todo un desastre y se ha notado su ausencia, cuando sale desde el banco, su salida ha sido decisiva en el partido y en cambio, cuando hace el ridículo como ayer, es que el equipo en general no estuvo bien y que no le ofrecieron alternativas. Claro claro, resulta que se supone que es el encargado de la creación y de dar fluidez al equipo, pero cuando el equipo no gana o no juega lo bien que se esperaba no es culpa suya, es culpa del resto. Así le va al Barça, con la autocrítica amiguista de atacar siempre a los mismos y tapar las miserias de los amiguitos.

Ayer Xavi hizo un ridículo espantoso, sin aportar nada de nada en la creación, fallando todos los pases hacia adelante cerca del área que intentó, los primeros quince minutos, perdió hasta 5 balones que pudieron costar caro de no ser por sus compañeros, pero claro esta semana no toca un artículo especial con el número de pases buenos. Sólo hay que ver en las estadísticas de Marca, que salen en rojo todos sus pases malos, pero claro esto no saldrá en los medios cavernarios culés. Es muy frustrante ver cómo tiene que bajar Messi al semicírculo central por qué no hace el cono su trabajo. En esa zona tiene que hacer conducciones larguísimas para poder romper y buscar la pared en carrera con el resto, es una zona en la que le pueden hacer falta porque no les va a costar amarilla ni faltas peligrosas, es facilitarle la labor. Y todo porqué el encargado de organizar y dar los pases no hace su trabajo, si le sumamos que Rakitic tiene que estar un poco más basculado porqué Messi abandona la banda desde la que parte de extremo y Alves parece un extremo más, la creación se queda totalmente vacía. Esto es algo que tiene que solucionar Lucho y rápido, porqué empezó bien, dando este rol a Iniesta y Rafinha, dos jugadores que pueden romper en una conducción, que pueden driblar, que tienen trabajo hacia atrás y que pueden generar peligro por ellos mismos, no necesitan que se mueva todo el frente de ataque para ellos y se lo pongan fácil. En el caso de jugar Xavi y Rakitic, tendrían que jugar al revés, porqué Rakitic tiene disparo y desborde en conducción, pero entonces se parte el equipo porqué Xavi ya se le espera poco en ataque, mucho más en defensa y si tiene que cubrir el agujero de Alves y ayudar a Busi. Si es que saca a Iniesta y lo tiene que sacar por Rakitic porqué no puede dejar a Xavi jugando de interior más retrasado. Hasta que se bajó los pantalones ante el poder interno de Xavi, el equipo no necesitaba que Messi bajara tan abajo, tanto Iniesta como Rafinha cumplían ese rol y Rakitic jugaba también más tranquilo, ahora hay que jugar con un ojo puesto a que no la pierda el cono para que no les maten a la contra.

Luego hay dos jugadores más que no pueden jugar en un once titular, Pedro y Mathieu. El canario es un auténtico despropósito en ataque, no mete un gol al arco iris y la que falla sólo en el área pequeña ayer es para que no juegue más de titular, tendrá todo el trabajo del mundo, pero a un delantero lo primero que se le pide es que sea efectivo. Suárez mataría por un pase así, mientras tiene que sobrevivir de migajas de rechaces y jugadas que se prepare él mismo.

Luego el caso Mathieu. Este señor no puede jugar de titular un partido serio fuera de casa, está haciendo el ridículo cada vez que juega, totalmente impreciso en los pases, con una cintura de cristal y que pierde la posición muy fácilmente o no sabe bien qué hacer cuando ataca el rival, se vio ante el PSG y se vio ayer que es un auténtico coladero. No ayuda al resto del equipo ver la poca seguridad que transmite, que tenga que estar el otro central tan pendiente de sus fallos. No entiendo por qué sigue jugando este paquete y Bartra tiene que chupar banquillo. Si chupa banquillo el chaval, que sea porqué juega Masche que es una garantía, o bien un Piqué que vuelve a estar a tono y excepto algún error puntual se le está viendo muy bien en las conducciones para romper la línea de presión y su capacidad en el juego aéreo. Tampoco entendí que descansara Masche cuando hay partido de copa entre semana y podría descansar entonces, que juegue Mathieu ese partido, que es más de su nivel.

Del equipo poco se puede destacar, la calidad una vez más de Messi, que estuvo muy sólo en ataque y que fue el único que generó algo y que lo intentó en todo momento, incluido un chut magistral de falta que tuvo la mala suerte de ir al palo. Pero ya lo llevo diciendo las últimas semanas, depender tanto de Messi es malo, porqué el día que no puede enchufarla él, el equipo es incapaz de marcar. Hay jugadores que necesitan dar un paso adelante ya, pero para eso hay que ponerlos y no poner a jugadores por decreto claro. Tampoco me gustaron los cambios de Lucho, para mi gusto debió salir Iniesta por Xavi y Rafinha por Pedro ya en el descanso, hizo los cambios tarde y mal en este partido, Iniesta necesita más minutos para ser decisivo, con veinte casi que ni entra en calor.

A Suarez se le vio muy desasistido, muy voluntarioso y probando cosas, pero sin ayuda del resto no se puede romper una defensa tan poblada. De lo poco salvable en ataque junto a Messi.

Muy bien también Piqué, que fue de los pocos que se les vio con ganas de ganar, junto con Messi y Suarez. El resto muy muy apáticos la verdad. Y suerte de la gran parada de Bravo, porqué la cosa pudo ser bastante peor si no detiene el chut de Lafita, en la primera parte. Otro jugador que estuvo a su nivel fue Busquets, pero no tiene el “brillo” en un partido como para ser destacable, cubre bien los espacios, presiona bien, va bien al corte y le da un buen ritmo de circulación a la pelota, pero claro, si se la da a Xavi y este la toca 4-5 veces antes de pasarla otra vez, para dársela al que tiene cerca para tener otro pase bueno en sus estadísticas, pues poco se puede hacer.