El Barça ganó en Cornellá, uno de los partidos
más difíciles que le quedaban, por desgracia ganó el Atleti, la jornada en la
que se preveía un cambio de líder, pero al final no fue así, quedan siete
jornadas y el Barça ganándolo todo será campeón, yo sigo pensando que el Atleti
pinchará un par de veces antes de llegar al Camp Nou, por lo que le valdrían
varios resultados, pero bueno, en todo caso, si se llegara empatados a la
última jornada, pues ganaría el mejor y punto, el que ganase sería el campeón de
liga. Al Barça ya le queda sólo una salida muy difícil, en el Madrigal ante el
Villareal, el resto son asequibles y no hay excusa, hay que ganarse todos.
Cierto que están la final de copa y la champions de por medio, pero con la
plantilla que tiene el Barça no hay excusas. Pero a pesar del resultado el
juego dejó mucho que desear, por desgracia, el Barça estuvo muy irregular
durante el partido y lo pudo pagar muy caro, el equipo pudo ganar fácil de
estar acertado los primeros minutos y pudo perder por los horribles veinte
minutos finales de la segunda parte, por dejarse generar tantas ocasiones de
gol por un español que se limitaba a defender y a intentar salir a la contra.
El equipo salió muy enchufado, generando hasta
cuatro ocasiones clarísimas de gol que se fallaron, unas más difíciles de
fallar que otras, sobretodo una imperdonable que falla Neymar a puerta vacía de
dentro del área pequeña, un jugador con esta calidad no puede fallar estas
ocasiones, porqué se pasa de un partido relativamente plácido a un partido muy
difícil porqué el rival se vino arriba. A partir de los primeros veinte minutos
la presión del español arriba tuvo sus frutos, en parte por el poco riesgo que
empezó a asumir Pinto en la salida de balón y lo poco que se ofreció el que se
supone que tiene que canalizar el juego, pero bueno, es algo a los que estamos
ya acostumbrados, por mucho que luego sus amigos de la prensa lo tapen. Cuando
juegan cinco medios la cosa no se nota tanto, pasa como con la roja, pero
cuando se juega con tres delanteros se ve claramente que no pueden jugar al
mismo tiempo Messi, Neymar y Xavi. Hoy en día andando no se gana a nadie, te
puedes permitir que tu crack no se mate a defender, que el resto del equipo
haga el trabajo, pero cuando se suma que uno de los extremos no corre y que el
medio que tiene que ayudar a Busquets, tanto en la creación como en la defensa
y las coberturas, es Xavi que va pastando por el campo, que encima se cree que
tiene veinte años y sube hasta la zona del central contrario a presionar,
cuando ya no está para esto, que luego baja al trote cochinero, pues deja el
equipo partido y a Busquets sólo ante todas las contras. Así es muy difícil
jugar. Se ha visto claramente en los últimos partidos. El día del bernabeu, el
Barça sufrió por la banda de Alves, en ella jugaban Xavi y Neymar, que no
bajaban a defender. El día del Celta el equipo no sufrió prácticamente en
defensa, jugaban dos medios que trabajan hacia atrás y en la banda de Alves
estaba Alexis, en el bernabeu en cuanto salió Pedro se acabó el riesgo por
banda de Alves. Ahora ayer, se sufrió por la banda de Alba, banda en la que
jugaba Neymar. El equipo partido a mediados de la primera parte, jugaba Xavi en
el medio. Si es que las cosas se ven muy claras, el problema es que el inútil
del entrenador se pierde más en hooliganismos por la banda y discutiendo con
los otros banquillos que ver los auténticos problemas del equipo. Ayer se ganó,
pero en la ruleta rusa de partir el equipo y dejarlo en defensa a su suerte no
siempre tendrán tanta suerte que los delanteros rivales no metan gol al arco
iris, que la tiren fuera y ni tenga que intervenir Pinto.
La segunda parte el equipo perico ya sufrió el
desgaste y fue totalmente del Barça, sin generar excesivo peligro, pero
encerrando al español en su campo y bordeando el área rival, pero le faltaba
una marcha más. Hasta que llegaron un par de jugadas de balón parado, una casi
marca Piqué, la otra en el rebote se produce el pase de Alves y la jugada del
partido. La jugada que salva a Neymar después de fallar lo infalible en el
partido. Una vez más una jugada decisiva le “salva” el partido, porqué si el
Barça llega a pinchar después de lo que falló, se hubiese visto totalmente
señalado, como el día del bernabeu, que le salvó la jugada que provoca el
penalti y expulsión. En una jugada muy rápida, el brasileño le gana la posición
a Javi López que hace dos penaltis, primero por pegarle patada a Neymar en el
estómago, antes ni de que controle, luego por unas manos clarísimas y
totalmente voluntarias. Las imágenes no mienten y se ve en las tomas laterales
mirando desde la portería del Barça y las frontales, que Neymar le da primero
en el pecho, no en la mano. Pero claro, los del “estilo plus” bien que se
esforzaron en repetir montones de veces la toma en la que parecen manos, como
la caverna. En todo caso da igual, si la tocara con la mano o no, le pega
patada en el estómago, es penalti como una casa, que lo quieran “pintar” a su
interés con si la toca con la mano o no, es otra historia de intereses
editoriales y cavernarios.
No se centrarán en la horrible actuación de
Clos Gómez en todos los errores en contra del Barça. Clos viendo el río
revuelto en el tema Undiano se quiso postular para la final de copa, ¿cómo
tenía que hacerlo? Pues es fácil, con una asquerosa barra libre, en un partido
lamentable que recordó al partido patético que hizo en el clásico hace dos años
en copa, en los que el Madrid hizo treinta faltas y sólo vieron dos amarillas,
que hasta la caverna lo reconoció y que acabó en empate a uno cuando el Barça
vapuleó al Madrid y empató tras una expulsión a Carvalho perdonada de forma
increíble, en la siguiente jugada empató. En el partido de ayer hubo 24 faltas
PITADAS al español por 8 del Barça y acabaron con 4 tarjetas los locales y 2
los visitantes. Lamentable.
Clos decidió que el español podía repartir lo
que quisiera y así se lo hizo saber a los jugadores pericos, perdonando 3
amarillas en diez minutos clarísimas. Luego claro, ya sabían que tenían que
hacer, faltas durísimas sin balón de por medio, con los sospechosos habituales
siempre, Colotto, Héctor Moreno, Javi López, Simao o Stuani. Al primero le
perdonó dos veces la expulsión de forma descarada, la primera a los cinco
minutos de la segunda parte, cuando agarra descaradamente a Neymar cuando se
iba en busca del pase al espacio que le había hecho Pedro, agarrón sin balón
clarísimo, pero claro, viendo como le perdonaba Clos se envalentonó y a los
diez minutos de la segunda parte hace una falta clarísima a Messi cuando ya le
había sobrepasado y cortando una contra, el árbitro pitó solo falta. Héctor
Moreno se dedicó a repartir por detrás en cada balón dividido con la
correspondiente barra libre asquerosa del árbitro y Javi López cada vez que Neymar
recibía le hacía dos o tres faltas por patadas con mala intención, que no
siempre pitaba el árbitro, y cuando las pitaba no sacaba amarilla, a pesar de
que le hizo más de 8 faltas. Luego hay dos penaltis en el área del español, uno
sobre Pedro y otro sobre Alexis. Pero lo más vergonzoso es cómo permitió la caza
de brujas en cuanto marca el Barça, con una entrada de roja de Víctor Sánchez a
Cesc que por gracia de Clos se convierte en amarilla, que le puede romper el
tobillo. Y claro viendo el listón pues el “señor” Fuentes, se comporta como un
rastrero mal deportista y hace una entrada miserable a Messi que va a hacer daño, es la única explicación que puede
tener que venga un tío a clavarte los tacos en el aductor sin pelota de por
medio. Se la hizo delante mismo del linier y no fue ni amarilla. Es evidente lo
que buscaba Clos y los dirigentes del Madrid se apuntaron en su libreta el
nombre de Clos para pedirlo para la copa, porqué como dijo Iturralde hace unos
meses, se ve que el Madrid elige o veta árbitros a su antojo para jugar las
finales. Luego hablan de villaratos.
En el apartado individual, para mí los mejores
del partido fueron Busquets y Piqué, ambos fueron los más regulares en el
partido y fueron los encargados de sacar el balón desde atrás, porqué el que
tiene que hacerlo, o sus amiguitos de los medios al menos, dicen que hace, se
escondió miserablemente y les pasaba el marrón a los dos cada vez con dos tíos
encima presionándoles. Busquets hasta en tres ocasiones tuvo que arriesgar
pisando el balón y haciendo caños para poder salir del embrollo que les metía
el otro, jugando de primeras hacia atrás y quitándose el marrón de encima. Así
luego tiene un 90% de acierto en los pases, así cualquiera. Aparte ambos
jugadores defendieron muy bien su zona y fueron muy bien por arriba cuando
desde atrás los pericos pegaban pelotazo hacia Sergio García.
El resto pues tuvieron una actuación
intermitente. Neymar alternó muy buenas jugadas individuales y colectivas con
fallos garrafales en la definición, Messi alternó muy buenos minutos con otros
en los que estuvo muy desaparecido. Alves estuvo muy bien por su banda, en
ataque principalmente, que alternó con errores graves de marcaje que pudieron
costar algún gol, lo mismo pasó con Alba. A pesar de que ambos no tuvieron
demasiada ayuda de los que les debían ayudar. Pedro hizo un muy buen trabajo
para el equipo, pero en cambio en ataque no desequilibró en ningún momento y
aportó bastante poco. Mascherano alternó fallos garrafales, como la falta que
hizo que por poco no es penalti sobre Javi López, o la que hace en el último
segundo de partido que tiene que salvar Piqué, alternando con buenas
anticipaciones y cortes importantes. Los que salieron, pues “gracias” a su
entrenador no tuvieron tiempo para nada prácticamente, aunque Iniesta salió
cuando el Barça marcó y sirvió para controlar el ritmo al final.
El entrenador pues como siempre reaccionó
tarde y mal y se perdió en batallas con el otro banquillo en lugar de mirar lo
que pasaba en el campo y hacer algo para cambiarlo.